Swingers, El atrГЎs de escena
Escribà “Dame el tuyo, toma el mГo” en Barcelona, varias semanas luego sobre encontrarse visitado un club swinger.
La crГіnica en primera humano acerca de los sitios de canje sobre parejas era un viejo esquema de epГteto Negra. Incluso que me fui, en Lima nunca existГa un Гєnicamente club liberal, debido a que contar la destreza seguГa estando un argumento pendiente para el periodismo local, especialmente de ese periodismo llamado “de inmersiГіn” o gonzo. Julio Villanueva me habГa comentado muchas vez, a raГz sobre un nГєmero sobre EN dedicado al sexo, su anhelo todavГa insatisfecho de pedir esa biografГa a alguien que estuviera externamente de el PerГє. Por mi parte, habГa publicado en el suplemento dominical en donde trabajaba, un informe en un caso “boom swinger” en LatinoamГ©rica, era una de esas notas que por abarcar al completo nunca abarcan nada y que incluГa pinceladas de la filosofГa swinger, opiniones, tips extraГdos del google y no ha transpirado unos pocos dudosos testimonios, al completo lo que estaba mencionado en un tono dentro de jocoso y no ha transpirado celebratorio. La conclusiГіn era trГЎgico No obstante orgullosa: que en escofina no necesitГЎbamos de locales especializados Con El Fin De vivir la vida porque cada quien se apaГ±aba igual que podГa: habГa vida swinger en limatГіn No obstante discurrГa en fiestas privadas y reuniones sobre amistades. Poco despuГ©s, me fui a investigar a Barcelona. Con la industria porno ninguna cosa despreciable, un mega festival sexy, y espacios que eran verdaderos paraГsos Con El Fin De gays, lesbianas, sadomasoquistas y toda fauna inconcebible, BCN emergГa como poblaciГіn liberal carente complejos. [Read more…]